¿Cuáles son las ventajas de un curso presencial en Postproducción?

Los cursos virtuales son cada vez más abundantes, pero te explicamos por qué es mejor asistir a un curso presencial

A muchos estudiantes, sobre todo a aquellos más jóvenes, les resulta complicado tener que andar desplazándose hasta el centro de formación y asistir a un horario previamente diseñado con sus clases. Por eso, para esos alumnos, la existencia de un curso de formación online puede ser una salvación. O eso se creen. Porque a la hora de ponerse a trabajar y aprender uno es consciente de las grandes diferencias entre un tipo de aprendizaje y otro. Careces de la proximidad que te ofrece un curso presencial o no tienes la oportunidad de compartir tus opiniones y los temas en los que tengas más dificultades. Y, sobre todo, renuncias un aprendizaje progresivo y exclusivo que un profesor puede proporcionar.

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El aprendizaje no siempre es igual de sencillo. Los cursos presenciales suelen ayudar al alumno a entender los temarios. | Fuente: Pixabay

Cuando hablamos de un curso de postproducción, la forma en la que adquirimos los conocimientos es trascendental. Esto puede ahorrarnos muchas horas de práctica improductiva por cuenta propia. Workshop Experience se ha centrado, principalmente, en la formación presencial y las prácticas, para que sus alumnos del Máster en Postproducción sepan desenvolverse perfectamente en el futuro.

Estas son algunas de las ventajas del aprendizaje en un curso presencial de postproducción:

1. Resolución de dudas

Es importante que tengamos la posibilidad de resolver las dudas que nos vayan surgiendo en el proceso. En caso de no poder responderlas es posible que quedemos estancados en el mismo lugar y no tengamos posibilidad de avanzar. Por eso, la presencia de la figura del profesor es realmente importante, no solo para que podamos seguir avanzando en nuestro trabajo sino para que procesemos toda la información de forma correcta.
En post-producción hay demasiada información que el estudiante ha de asimilar y, de no hacerlo bien, podríamos enfrentarnos a problemas en futuras labores profesionales. Si quieres aprender a manejar correctamente tus herramientas de trabajo has de conocerlo todo sobre ellas y, en caso de que te surjan preguntas en el proceso de aprendizaje, tener la oportunidad de que te las respondan.

2. Trabajar en grupo

Poder interactuar con tus compañeros en el proceso puede ser de gran ayuda. En parte porque ponéis en común todos los conocimientos adquiridos pero, sobre todo, porque sus preguntas y comentarios pueden ayudarte a aclarar temas que no tenías del todo claro. Esa posibilidad la pierdes cuando se trata de un curso de formación online.

3. Generar sinergias en futuros proyectos con otros compañeros

Entre las ventajas de tener compañeros de clase están las amistades, la creación de vínculos entre alumnos que, en el futuro, puede derivar en una colaboración profesional. La mayoría de las buenas ideas acaban surgiendo en grupos. Un braimstorming entre muchos, una unión de fuerzas y conocimientos entre compañeros puede acabar teniendo resultados gratificantes.

El trabajo en grupo es una de las experiencias más enriquecedoras de un curso presencial | Gonzalo Álvarez Marñón Fuente: Flickr
El trabajo en grupo es una de las experiencias más enriquecedoras de un curso presencial | Gonzalo Álvarez Marñón Fuente: Flickr

4. Asegurar la atención

Para algunos alumnos la disciplina puede ser un elemento ausente en la formación online. A la hora de ponerse a estudiar en casa no es tan fácil concentrarse. El ordenador es una fuente de distracciones. Tener que leer los contenidos por primera con tantos elementos que redirigen tu atención puede ser complicado y derivar en que no hayas entendido el texto. Las distracciones son el mayor enemigo de los estudiantes, y cuando nos encontramos en una clase en la que el profesor explica el contenido de forma dinámica y entretenida, esa atención del alumno no se pierde (tanto).

5. Práctica y error… con una red de protección

Las prácticas en el aula te proporcionan una seguridad extra: la revisión del profesor de forma personalizada. Esto te ayuda a darte cuenta de tu error y corregirlo, asegurando así un mejor y más profundo aprendizaje de la materia. Por eso es importante también que los alumnos pidan ayuda en la corrección de sus trabajos y, sobre todo, orientación para hacerlos correctamente.

Apuntes del master en postproducción, un curso presencial

6. La exclusividad que te proporciona el profesor

Como ya hemos mencionado anteriormente, la principal diferencia entre un curso online y un curso presencial es la existencia de un profesor que enseñe y explique los materiales de la asignatura en un aula. La cercanía y el trato profesor-alumno puede favorecer tu aprendizaje de forma notable. Es importante destacar que un buen profesor que sepa transmitir de forma correcta sus conocimientos sobre una materia puede inspirar a muchos alumnos e incentivar sus ganas de aprender.
Con su presencia, el profesor asegura que estés aprendiendo y que tu evolución en la asignatura es la esperada. En caso negativo, debe asegurarse de poner los medios necesarios a disposición del alumno para que la situación cambie.

7. Combina online-presencial

Permite combinar la cercanía de la educación presencial y la facilidad de acceso a contenidos que proporciona internet. Muchas escuelas incorporan un campus o aula virtual en el que vuelcan los contenidos para facilitar a sus alumnos el aprendizaje y servir de apoyo a lo enseñado en el aula.

Por eso, aunque para algunas personas sea más cómodo el aprendizaje online (o puede que sea su única alternativa por falta de tiempo o imposibilidad de acudir físicamente), la mejor opción suele ser la enseñanza tradicional. Un curso presencial aporta esa familiaridad y cercanía que se agradece tanto cuando aprendes.

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